Sistemas de visión nocturna o de asistencia en maniobras con poca visibilidad. Estas son dos de las tecnologías que se están popularizando en los automóviles. Los constructores parecen empeñados en conseguir que el coche vea todo lo que la vista de su conductor no alcance. Una tendencia que los talleres deben tener en cuenta, ya que cada vez se hará más patente en sus instalaciones.
Una de las últimas novedades en llegar ha sido la tecnología Night Vision, incorporada en el nuevo Peugeot 508. Se trata de un sistema con una cámara de infrarrojos capaz de detectar animales o personas a una distancia de hasta 250 metros en bajas condiciones de visibilidad.
Esto quiere decir que el dispositivo garantiza la detección más allá del alcance de las luces de carretera. La imagen de infrarrojos se proyecta en el cuadro de instrumentos digital, dentro del propio campo de visión del conductor.
Este dispositivo va acompañado del Lane Position Assist (LPA), que mantiene la posición del vehículo en la carretera. También de un freno automático de emergencia y alerta de riesgo de colisión, que detecta peatones y ciclistas de día y de noche hasta 140 km/h.
Al circular por ciudad, otros sistemas ayudan al conductor en ciertas maniobras con poca visibilidad, como el Visiopark 2, que ofrece visión en 360 grados, o el Full Park Assist con función perimétrica Flankguard. En ambos casos, el sistema gestiona de manera autónoma la dirección, el acelerador y el freno para estacionar y desaparcar.