Dos nuevos talleres ilegales han sido localizados por la Guardia Civil. Esta vez ha sido en las localidades de Cambre y Oza-Cesuras (A Coruña), en el marco de una campaña de vigilancia y detección de centros que no estén registrados oficialmente y que carezcan de licencia municipal.
En el primero de los municipios, se encontró un centro que desarrollaba actividades de reparación a puerta cerrada. No contaba con ningún cartel o placa señalizadora de tal actividad. Este establecimiento apareció a raíz de un vertido con espumas en el cauce de un riego que limita con el polígono en el que se encontraba, según informa Galicia Press.
“Tras la inspección de la zona, la mencionada patrulla ubicó el origen y la naturaleza del mismo, correspondiendo al lavado de piezas realizado en esta nave, sin la documentación correspondiente, vertiendo las aguas residuales a la canalización de pluviales del polígono”, explican desde el instituto armado.
El segundo taller ilegal se encontraba en los anexos de una vivienda en Oza-Cesuras. En él había un depósito con varios vehículos desguazados de los que aprovechaban sus piezas para la reparación de otros, así como para actividades de reparación de chapa y pintura, sin las pertinentes autorizaciones para las mismas.
La Guardia Civil inspeccionó también la empresa receptora de las piezas extraídas de los vehículos, ya que incumplía la normativa sobre trazabilidad y gestión de este tipo de residuos.