El motor de combustión lleva cierto tiempo en entredicho. Sin embargo, algunos expertos del sector ofrecen una serie de claves que podría dar continuidad a este sistema, que es eficiente y permite fabricar vehículos de bajo peso y coste asequible.
Tal y como recoge Autofacil, la organización Asepa destaca las siguientes medidas para alargar la existencia del motor de combustión.
1. Disminuir las pérdidas en forma de fricción con aceites más fluidos, tolerancias más pequeñas y recubrimientos superficiales más duros, suaves y deslizantes, denominados DLC (diamond like coatings).
2. La hibridación suave a 48 voltios puede sustituir al motor de combustión en momentos en los que su eficiencia es peor como, por ejemplo, al iniciar la marcha.
3. Electrificar elementos como los compresores de aire acondicionado, alternadores o motores de arranque con energía regenerada durante las frenadas.
4. Construir un motor de combustión que aproveche la mitad del calor que se libera al quemar el combustible.
5. Reducir el consumo de aceite.
6. Para reducir la cantidad de emisiones de CO2, la única alternativa es, además de reducir el consumo, compensar las emisiones interviniendo en otros puntos del ciclo de vida del combustible. Por ejemplo, se podrían fabricar combustibles empleando CO2 como materia prima.
7. Usar energía eléctrica recuperada durante las frenadas para calentar el agua y el aceite del propulsor e, indirectamente, los componentes mecánicos, además de encapsular el motor para evitar que se enfríe rápidamente al apagarlo.
8. El tratamiento de gases. En este caso, el AdBlue es la solución casi perfecta para acabar con los óxidos de nitrógeno. Sin embargo, es caro y sólo funciona bien dentro de cierta banda de temperaturas.
9. Combustible sintético como alternativa a los carburantes fósiles. En la actualidad, la opción más empleada es la del biodiésel basado en aceite de palma. Sin embargo, tiene un grave impacto en términos de deforestación y explotación laboral. En su lugar se podrían utilizar algas para convertir energía solar y CO2 en combustible.
10. La sobrealimentación. La eficiencia de un motor térmico es proporcional a la presión a la que se produce la combustión. Esto quiere decir que casi cualquier sistema de sobrealimentación tiene el potencial para reducir el consumo.
11. Alcanzar una combustión más rápida, más parecida a una explosión, usando varios focos simultáneos.
12. Aumentar la compresión del motor de gasolina cuando funciona a cargas parciales. Esto se podría lograr reduciendo la cilindrada a la mitad y dejando que hasta la mitad de los cilindros funcionen en vacío.
13. Construir un motor súper ligero con la mayor cantidad posible de elementos de plástico.
14. Fijar un rumbo estable en la política medioambiental. Así desperecería la inseguridad sobre qué exigirán las futuras normativas.
15. Continuar con la filosofía del downsizing, que consiste en reducir la cilindrada y mantener la potencia para bajar el consumo.
16. Establecer reglamentos en todas las categorías del automovilismo deportivo para convertir los coches en auténticos prototipos rodantes en vez de máquinas construidas siguiendo atentamente la normativa correspondiente de la FIA. De este modo podrían surgir muchas innovaciones de las que el motor de combustión podría aprovecharse.
17. Idear una compresión variable y flexibilizar el proceso de combustión sin que el incremento en fricción, complejidad y peso desbanque las ventajas potenciales.
18. Mejorar su packaging para conseguir ocupar menos espacio, tal y como ocurre en los vehículos eléctricos.
19. Eliminar el sistema de distribución para reducir las pérdidas mecánicas derivadas de accionarla y abrir y cerrar las válvulas a placer para mejorar el proceso de combustión.
20. Capitalizar el sonido del motor de combustión a su favor.