Las ventas de coches eléctricos crecerán en el año 2020. Así lo vaticina MSI, que estima que estas matriculaciones aumentarán en torno al 14,2%. No es que se hayan vuelto baratos de repente o que hayan mejorado su autonomía de manera exponencial: la culpa de este comportamiento del mercado la tendrá la nueva normativa de emisiones de la Unión Europea que entrará en vigor el día 1 de enero.
La nueva medida fija la media de emisiones que pueden vender las marcas en un máximo de 95 g/km de CO2. Por cada gramo de exceso y coche, deberán pagar 95 euros de multa. De esta manera se intentará impulsar la venta de eléctricos, ya que sus emisiones podrían equivaler a dos ventas.
Esta es la razón por la que muchos concesionarios deberán automatricular un buen número de vehículos eléctricos. Las estimaciones apuntan a un aumento del 72% de estas automatriculaciones que, a su vez, provocará un aumento del stock de los kilómetro cero. Eso sí, está por ver su efecto real en los precios que pagará el cliente final y si será suficiente para convertirlos en una alternativa de compra realista.