Es el elemento más valorado por los conductores en cuanto a seguridad. Algo lógico, ya que se trata de uno de los dispositivos de seguridad activa más importantes de un vehículo. El sistema de frenos es esencial para una conducción tranquila y segura.
Por ese motivo, el proveedor de Cecauto Road House ha elaborado un decálogo para que esa conducción sea, efectivamente, lo más segura posible, basada en un correcto mantenimiento de los materiales de fricción.
1. Cada conductor y cada coche son distintos: los que someten al coche a un mayor esfuerzo de frenado (trayectos montañosos o con carga) deben realizar revisiones de los frenos más frecuentes.
2. No abusar del freno: utilizar el cambio de marchas para reducir velocidad al descender pendientes es una buena estrategia para lograrlo.
3. Estar atentos a las señales que emite el vehículo: también es esencial saber interpretarlas. Por ejemplo, las que nos indican un desgaste de los frenos.
4. Ojo a las vibraciones: si las nota al frenar, el conductor debe asegurarse de que las pastillas y discos siguen en buenas condiciones acudiendo a su taller.
5. Si para frenar con normalidad hay que pisar el pedal hasta el fondo, seguramente las pastillas o los discos estén dañados.
6. Si el pedal del freno se hunde al pisarlo, puede haber una fuga en el circuito de frenos. También puede ser que las pastillas estén muy desgastadas.
7. ¿Chirridos? Si se perciben estos ruidos molestos, puede ser señal de que las pastillas sean nuevas, pero también de que algo no va bien en el sistema de frenos.
8. Revisar el sistema de frenado cada vez que se va al taller: no importa la razón de la visita, conviene hacerlo siempre.
9. Es esencial confiar en el asesoramiento del taller y sus profesionales.
10. Usar recambios de calidad: asegurarse de que los respuestos utilizados cumplen todas las normativas que garantizan la máxima calidad es vital.