Las averías en el turbo son un problema que cualquier conductor quiere evitar. Por este motivo, el proveedor de Cecauto Ajusa recuerda la importancia de una buena lubricación del turbocompresor para evitar este tipo de fallos.
El turbo forma parte de un sistema de sobrealimentación cuya función es comprimir los gases y expulsarlos con mayor presión a los cilindros, ofreciendo una potencia extra al motor con un menor consumo.
Este elemento se ve sometido a unas condiciones muy exigentes, como sus elevadas revoluciones de giro o su alta temperatura. Para evitar su fallo, Ajusa recomienda asegurarse de que su lubricación es correcta.
También aconseja sustituir la línea de alimentación de aceite al turbocompresor y emplear el lubricante adecuado, que se deberá cambiar cuando indique el fabricante. Asimismo, es necesario asegurarse de que el nivel de aceite sea correcto en todo momento.
Por último, Ajusa aconseja revisar que la bomba de aceite está en buen estado y la conservación de los conductos, sobre todo el tubo de engrase. Este elemento tiene un papel fundamental en la lubricación del turbo, ya que es el que se encarga de introducir el aceite al eje de la turbina.
Entre las causas más comunes por las que este componente se avería se encuentran:
– El deterioro de la línea o fuga en alguna de sus conexiones.
– Obstrucción de las paredes internas del tubo por el uso de aceites inadecuados.
– Atasco en las paredes que impide el normal paso del aceite, como consecuencia de los depósitos de restos de aceite carbonizados.
– La reutilización de una línea con conexiones deformadas tras su apriete, lo que supone un riesgo de fuga.
¿Quieres saber más sobre cómo reparar estos componentes? Mira este vídeo que ha preparado Ajusa: