Echar un vistazo a las patentes que se registran puede dar muchas pistas sobre lo que nos espera en el automóvil del futuro. La última de Tesla, por ejemplo, esboza una idea sobre cómo serán los limpiaparabrisas del futuro.
Según informa Híbridos y Eléctricos, la compañía ha patentado unos limpiaparabrisas electromagnéticos que irán bajo el capó del coche y desaparecerán cuando no llueva. Además, solamente emplearán un brazo, que coincidirá exactamente con la forma del parabrisas.
Un sistema electromagnético situado bajo el capó con un actuador lineal, un carril guía y un sistema de imanes son los elementos que harán funcionar este sistema. El dispositivo posee además un riel con varios imanes horizontales y el brazo móvil presenta perforaciones rodeadas por una bobina electromagnética que se encarga de empujar el agua.
El dispositivo, según la compañía, evita esfuerzos mecánicos sometidos a las inclemencias meteorológicas. Además, la firma señala la poca eficiencia de estos sistemas tradicionales, añadiendo que perjudica a los vehículos eléctricos, ya que la fricción contra el cristal aumenta el consumo de energía eléctrica.
Para activar el sistema se emplean redes neuronales que detectan la lluvia y la nieve. El sistema se implementará en los vehículos de la marca con piloto automático de segunda generación.